Qué comer en Lleida: los 5 platos más típicos de la región

En Lleida, una ciudad ubicada en Cataluña, podemos encontrar una gran variedad de platos típicos que no podemos dejar de probar.

En este artículo, les presentamos los 5 platos más típicos de la gastronomía de Lleida, pues nuestra intención es que puedas probarlos en tu visita a la provincia.

Entre los platos que no podemos dejar de probar en Lleida, encontramos la coca de recapte, una masa de pan con pimientos, berenjenas, cebolla y otros vegetales, que puede ser servida fría o caliente.

Otro plato típico es la escudella i carn d’olla, un guiso de carne y verduras que se sirve con fideos o arroz. Además, no podemos dejar de probar los caracoles a la llauna, un plato de caracoles cocidos a la brasa con ajo y perejil.

Estos son solo algunos de los platos que hacen de la gastronomía de Lleida una experiencia única. Pero hay más… Conócelos.

Caracoles A La Llauna

Uno de los platos más populares y típicos de Lleida son los caracoles a la llauna. Este plato consiste en caracoles de tierra cocidos con hierbas y especias, acompañados de salsa alioli, romesco y salsa picante. Es una delicia que no te puedes perder si visitas la ciudad.

Uno de los mejores lugares para probar los caracoles a la llauna es el restaurante Els Trulls. Allí, se siguen haciendo con el mismo esmero y tesón de antes. Si tardan un poco en llegar a la mesa, es por una buena razón: se cocinan con paciencia y dedicación para que estén en su punto justo.

Si prefieres hacerlos en casa, aquí te dejamos una receta tradicional que puedes aprender en un minuto de la mano del cocinero Eugeni de Diego:

• Limpia los caracoles y ponlos en agua con sal durante 24 horas para que suelten la baba.
• Escúrrelos y cuécelos en agua con sal, laurel, tomillo y romero durante 20 minutos.
• Escúrrelos de nuevo y ponlos en una llauna con aceite de oliva, ajo picado, perejil, pimienta negra y sal.
• Mételos en el horno precalentado a 180 grados durante unos 20 minutos.
• Sirve los caracoles calientes, acompañados de salsa alioli, romesco y salsa picante.

Recuerda que los caracoles a la llauna son una exquisitez que no puedes dejar de probar si visitas Lleida.

Panadones

Los panadones son una deliciosa opción de comida típica de Lleida que has de intentar degustar. Se trata de unas empanadas saladas que se preparan con una masa de pan rellena de espinacas, pasas y piñones.

Esta especialidad es muy popular en la región y se puede encontrar en la gran mayoría de pastelerías y bares de la zona.

Los panadones son una opción ideal para aquellos que buscan una comida rápida y sabrosa. Además, son una opción perfecta para llevar contigo mientras exploras la ciudad.

La combinación de espinacas, pasas y piñones crea un sabor único y delicioso que no te puedes perder.

En algunos lugares, los panadones también se preparan con otros ingredientes, como carne, queso o cebolla. Sin embargo, la versión original con espinacas, pasas y piñones es la más popular y la que recomendamos probar.

Escalivada Con Bacalao

Otro de los platos más típicos de Lleida es la escalivada, una receta catalana que consiste en asar verduras en el horno o a la parrilla y servirlas frías.

En Lleida, la escalivada se suele servir con bacalao, lo que le da un toque salado y delicioso.

Para preparar la escalivada con bacalao, se asan pimientos rojos, berenjenas y cebollas en el horno o a la parrilla hasta que estén tiernos y se pelan y cortan en tiras.

Luego se mezclan con aceite de oliva, vinagre y sal y se dejan reposar en la nevera para que se enfríen.

Por otro lado, se cuece el bacalao y se desmenuza en trozos pequeños. Se mezcla con la escalivada y se sirve frío como entrante o plato principal.

En Lleida, la escalivada con bacalao es un plato muy popular en los restaurantes y bares de la ciudad.

Si quieres probar este delicioso plato, puedes buscar en Tripadvisor los mejores sitios para comer bacalao en Lleida y disfrutar de una comida típica de la región.

Fricandó De Vedella Amb Bolets Y Orellanes

El fricandó de vedella amb bolets y orellanes leridano es un guiso de carne de ternera con setas y orellanas, que son una variedad de hongos comestibles.

Para preparar este plato, primero se corta la carne en tiras finas y se sazona con sal y pimienta. Luego se fríe en una cazuela con aceite hasta que esté dorada. A continuación, se retira la carne y se reserva.

En la misma cazuela, se sofríe la cebolla, la zanahoria y el puerro picados. Cuando estén dorados, se añade la carne y se cubre con caldo de carne o agua. Se deja cocinar a fuego lento durante unos 30 minutos.

Mientras tanto, se limpian y se cortan los bolets y las orellanas. Se añaden al guiso y se deja cocinar durante otros 30 minutos. Para espesar la salsa, se puede añadir un poco de harina disuelta en agua.

El fricandó de vedella amb bolets y orellanes se sirve caliente, acompañado de patatas fritas o arroz blanco. Es un plato muy sabroso y reconfortante, perfecto para los días fríos de invierno.

Cristinas De San Blas

Las Cristinas De San Blas son una receta muy típica en Lérida, sobre todo durante la festividad de San Blas. Estas deliciosas pastas se elaboran con una masa suave y esponjosa, que se mezcla con almendras y se cubre con un glaseado dulce.

Para preparar las Cristinas De San Blas, primero se mezcla la harina con la levadura fresca, la mantequilla, la leche, la ralladura de naranja y limón, el agua de azahar y una pizca de sal. Se amasa bien hasta obtener una masa homogénea y se deja reposar durante una hora.

Una vez que la masa ha reposado, se añaden las almendras fileteadas y se mezcla todo bien. Se forman pequeñas bolas con la masa y se colocan en una bandeja de horno. Se hornean durante unos 15 minutos, hasta que estén doradas.

Mientras tanto, se prepara el glaseado mezclando azúcar glas con un poco de agua caliente. Una vez que las Cristinas De San Blas están listas, se cubren con el glaseado y se dejan enfriar antes de servir.

En resumen, las Cristinas De San Blas son una deliciosa y tradicional receta de Lleida, perfecta para disfrutar durante la festividad de San Blas o en cualquier momento del año. Su sabor suave y almendrado las convierte en una opción perfecta para acompañar un café o té.