Cofradía del Cristo del Humilladero

En Cáceres, como en cualquier otra ciudad de España, la Semana Santa también se vive en los barrios de la ciudad y, precisamente, el caso de la Cofradía del Cristo del Humilladero es de las que cumple con esta calificación.

Y cumple con esta calificación, porque sus procesiones discurren principalmente por los Barrio del Espíritu Santo y de Llopis Iborra, no acudiendo a las calles del Centro Histórico de la ciudad, aún perteneciendo a la nómina de las hermandades de la Semana Santa de Cáceres, particularidad ésta que la hacen única en Cáceres, y en el mundo.

Por otra parte, es la única cofradía en Cáceres, que cuenta con Banda de Cornetas y Tambores propia, y además, con una sección infantil de la misma, con más de 28 componentes.

Nombre completo de la Cofradía del Cristo del Humilladero

La Cofradía del Cristo del Humilladero ha vivido múltiples efemérides a lo largo de su historia, tales como recibir bula papal en el año 1590, de ahí que pueda ser denominada como “Pontificia”.

Por otra parte, en el año 1846, la Reina Isabel II sanciona sus Reglas, de ahí que se le pueda denominar “Real”.

Todas estas efemérides han jalonado su historia y han hecho que se denomine de la siguiente manera:

Pontificia y Real Cofradía del Espíritu Santo, Santísimo Cristo del Humilladero y Nuestra Señora de la Encarnación.

Historia de la Cofradía del Cristo del Humilladero

Tal como hoy la conocemos a la Cofradía del Cristo del Humilladero, data de fechas recientes. Sus orígenes los tiene en la extinta Cofradía del Espíritu Santo, que radicaba en el Convento de San Francisco. Se fundó la Cofradía del Espíritu Santo en el siglo XV.

Esta cofradía durante mucho tiempo vivió en el total olvido del pueblo cacereño. Fue ello causa de que se hallara en diversos trances, quizás el más espinoso el de la posibilidad de desaparición. Esta situación se agudizó más en el siglo XIX, pero gracias a la mediación de los sacerdotes no cupo la posibilidad de desaparición.

Las circunstancias que propiciaron la posibilidad de desaparición, según cuentan fuentes del siglo XIX pudieron ser:

• Fue privada la cofradía de sus documentos, destruidos por la francesada.
• Su ermita arruinada como consecuencia del trato recibido durante su utilización como hospital militar y estancia de los de Napoleón.
• El Cristo del Espíritu Santo se suponía que se hallaba en casa de un particular, Dª Isabel , viuda de D. Faustino Gómez.
• Y diversas disputas con la Cofradía del Nazareno por distintos bienes que pudieran pertenecer a una u otra. 

Fue este el panorama que presentó el rector del templo, D. Pedro Chaves Flores, cuando se reunieron en la Sacristía de la Iglesia de San Mateo el 24 de Febrero de 1833, los siete miembros supervivientes de la hermandad:

• D. Antonio Merino
• D. Manuel Cirilo
• D. Antonio Clavel
• D. Francisco Carrasco
• D. Miguel Gómez
• D. Pedro Guerra
• y D. Juan Espada

Entre las primeras metas que se propusieron en aquella “restaurada” cofradía fue la de recuperar la imagen titular de la misma, el Santísimo Cristo del Humilladero y los cultos a la misma. La imagen sería colocada en el templo parroquial.

Su primer mayordomo fue D. Eleuterio Álvarez y su fiesta principal quedaría establecida en el Día de Pentecostés. A continuación se procedió a la elaboración de unos Estatutos, que datan del 20 de marzo del citado año de 1833. Se aprobaron por el Prelado de la Diócesis, D. Ramón Montero con fecha de 22 de marzo del mismo año. Los puntos principales que los mismos contenían eran:

• culto al Santísimo Sacramento
• y llevarlo a los enfermos en forma de Viático con la mayor pompa y solemnidad posible.     

En un principio quedaría erigida canónicamente en el Templo de San Mateo hasta que la misma gozase de un templo parroquial o ermita propio.

En estos años de reorganización, fallece Dª Josefa Mostazo, una importante benefactora en la historia de la Cofradía del Espíritu Santo (que con el paso del tiempo se denominaría también del Cristo del Humilladero), y con ella también desaparece el vínculo existente entre esta cofradía y la Cofradía del Nazareno por diversos bienes que ambas cofradías tenían en común, reclamando el por entonces mayordomo de la Cofradía del Espíritu Santo, D. Benito Mogollón, todos los bienes pertenecientes a la Cofradía del Nazareno. Los miembros de la Cofradía del Nazareno se oponían a tal entrega y hubieron pequeñas discrepancias.

Andando en el tiempo, esta cofradía es relanzada definitivamente hacia 1950 por el cura-párroco de San Mateo, D. Santiago Gaspar Gil, como fruto de las Santas Misiones, en las que participaban los hermanos de las cofradías penitenciales portando la Cruz de las Santas Misiones.

Hoy día esta cruz de las Santas Misiones se puede contemplar en el Templo de Santiago de los Caballeros.

A lo largo de su historia ha desfilado incorporada a diferentes cofradías, como la de la Vera Cruz hasta que organizada la misma en el interior de la Barriada del Espíritu Santo lo hizo con la independencia que lo hace actualmente.

Procesionó en aquellos años distintas imágenes de Virgen, las cuales fueron:

• la Virgen del Buen Fin, perteneciente a la Cofradía de la Vera Cruz
• la Virgen de los Dolores, perteneciente a la Cofradía de la Virgen de los Dolores, y actualmente a la Cofradía del Cristo de las Batallas
• y ya por fin, en la década de los 60, el genial imaginero cacereño, D. Venancio Rubio dejaría su impronta en la belleza de la imagen de Mª Corredentora (actualmente Nuestra Señora de la Encarnación), actual imagen que procesiona la cofradía junto con la imagen del Cristo del Humilladero. 

Desde ese momento ya es Cofradía del Cristo del Humilladero.

En los años 70 del siglo XX, y debido al estado de deterioro de la imagen titular del Santísimo Cristo del Humilladero, se acuerda adquirir una nueva imagen que sustituyera temporalmente al antiguo crucificado gótico del siglo XIV, y de esta forma llegó el actual Cristo de la Preciosa Sangre a la Cofradía del Cristo del Humilladero, pero que desde los años 70 del siglo XX hasta el año 1992 procesionó bajo la advocación de Cristo del Humilladero, dejando de procesionar ese año y, volviendo a hacerlo, en el año 1999, ya como Cristo de la Preciosa Sangre, en la noche del Miércoles Santo.

Pero, desde el año 2023, la procesión que se celebra la noche del Miércoles Santo en Cáceres, pasa a celebrarse en la tarde-noche del Sábado de Pasión en Cáceres.

Pasos de la Cofradía del Cristo del Humilladero

La Cofradía del Cristo del Humilladero dispone de cuatro pasos procesionales, cuales son los siguientes:

• Cristo de la Preciosa Sangre
• Señor amarrado de la Columna
• Santísimo Cristo del Humilladero
• Nuestra Señora de la Encarnación

Hábito cofrade de la Cofradía del Cristo del Humilladero

Para hablar del hábito cofrade de la Cofradía del Cristo del Humilladero, hay que hacer con carácter previo, una matización desde el punto de vista de que en cada una de sus procesiones, esta Cofradía sale a la calle con un hábito diferente.

Procesión del Sábado de Pasión de la Cofradía del Cristo del Humilladero

Esta procesión, en sus orígenes, tenía un carácter más penitencial, de hecho salía en silencio, únicamente roto con el soñar ronco de un timbal destemplado, y saliendo a las calles en la noche del Miércoles Santo, pero desde el año 2023, cambian el día de la estación penitencial al Sábado de Pasión, y le incorporan la intervención de la Banda de Cornetas y Tambores de la Cofradía, tanto en su sección de adultos, como en la infantil.

El hábito que emplean es túnica de color burdeos, y capuchón sin forma de color morado, para cubrir el rostro.

Procesión del Jueves Santo de la Cofradía del Cristo del Humilladero

Para la estación penitencial que la Cofradía del Cristo del Humilladero celebra el Jueves Santo en Cáceres, la indumentaria es la siguiente:

Hermanos de Escolta: túnica y capuchón color burdeos, capa blanca y cíngulo blanco de lana.

Hermanos de Carga: túnica color burdeos y capelina blanca con el distintivo de la Cofradía, que es el la paloma del Espíritu Santo, rodeada de un halo dorado.